Mónaco.- Charles Leclerc consiguió su primera victoria en el Gran Premio de Mónaco, la victoria más ansiada porque se le negó en 2021 y 2022 por diversas desgracias. Oscar Piastri y un afortunado Carlos Sainz, le han secundado en el podio, después de que el madrileño recibiera una vida extra en la primera vuelta, tras un accidente pavoroso en el que estuvo envuelto Checo Pérez.
El español de Ferrari había pinchado y todo parecía haber acabado para él, pero por detrás, Magnussen apareció para chocar con Pérez y causar un desastre que afortunadamente no tuvo heridos, salvo un fotógrafo italiano al otro lado de la valla, con cortes leves de las piezas, como cuchillos, que volaron.
Para Sainz fue providencial, pues dirección de carrera detuvo la prueba de inmediato en la línea del Safety Car 2, punto en el que Carlos era tercero. Por eso en la resalida pudo volver a ocupar su puesto original, que le llevó al podio final.
La carrera, después de la congoja, viró a la siesta. Todos cambiaron gomas, como estipula el reglamento, para la nueva parrilla y con ellas, tras la resalida, la mayoría pudo cruzar la meta, 76 vueltas más tarde.
El único que pudo ganar un puesto en la estrategia fue Max Verstappen, quien respondió a un ataque de Hamilton para undercut y no sólo se protegió, sino que desnudó a Mercedes y obligó a Russell a defenderse de forma agónica hasta el final. No hubo adelantamiento, porque en Mónaco es imposible en pista, pero puso algo de espectáculo.
Por delante nadie entró a boxes y Leclerc gestionó sus duros para una gran victoria, la sexta de su carrera tras 25 poles, que le deja mucho más cerca del líder. Son 35 puntos de distancia respecto a Verstappen, pero en tendencia ascendente para Ferrari y decreciente para Red Bull. Hay Mundial, o ilusión de que lo haya. Mbappé, en escala camino de Madrid,le dio el banderazo fina,l tras ganar la Copa de Francia este sábado.
Para Carlos supone pegarse a Norris en la clasificación y volver al podio, algo que no sucedía desde Japón. Lo necesitaba.
Fernando Alonso ha terminado 11º, al borde de los puntos tras haber intentado impulsar a Stroll, que acabó desllantado.
Nada rodó a su favor, pues el accidente fue por detrás y sólo ganó la plaza del abandono de Ocon (tras chocar una vez más con su compañero Gasly en Alpine).
La repesca de Sainz tampoco jugó a su favor y cuando le había abierto un hueco a Lance para que tuviera parada gratis, el canadiense se fue al muro y todo su trabajo fue en vano. Luchó por mantenerse 11º ante el acoso de Ricciardo y esperando algún incidente por delante para entrar en los puntos, pero fue en vano
Es un fin de semana para olvidar para Aston, al que nada le salió con ambos coches. Es el momento de mirar adelante y mejorar el coche para Canadá y España.