Después de ver cómo el sinaloense Gilberto “Zurdo” Ramírez unificó los cinturones AMB y OMB de peso Crucero tras vencer por decisión unánime al británico Chris Billam-Smith, es sano poner sobre el encordado una pregunta: ¿Le conviene al mazatleco enfrentar al ucranino Oleksandr Usyk?
El promotor Óscar de la Hoya manifestó su interés por la pelea entre Ramírez (47-1-0, 30 KOs) y Usyk, de quien dijo piensa combatir de nuevo en las 200 libras.
Usyk (22-0-0, 14 KOs) es el rey absoluto de los pesados, tiene casi un año sin pelear, desde que destronó de forma contundente al mastodonte inglés Tyson Fury (34-1-1, 24 KOs).

Al sinaloense, desde luego, le convendría chocar con Usyk porque lo haría por una bolsa que jamás ha imaginado cobrar, pero a cambio de un elevado riesgo de perder ambas coronas.
La fiereza, velocidad y contundencia del ucraniano no conoce límites; es un motor sin reversa.
El 21 de diciembre el mundo entero tendrá de nuevo la oportunidad de ver en acción a Oleksandr Usyk en la pelea de revancha ante el gigante Tyson Fury.
Quizás, después de ese día, la respuesta a la pregunta del primer párrafo sea distinta.
